jueves, 15 de septiembre de 2022

Dolores de la Santísima Virgen: Soledad de María


María ha sido testigo de la terrible agonía de Jesús, cuya cruenta muerte ha consumado la voluntad de quien, un día, encomendara a la Virgen la maternidad de Cristo. Madre e hijo han sido víctimas de la más insufrible hipocresía mundana.

La soledad es el más hiriente dolor de una madre tan desdichada, que ha sido despojada del precioso fruto de sus entrañas, y, a su vez, la más amarga espera de la verdadera vida eterna en Cristo Jesús. ¡Bendita sea la excelsa Madre de Dios, María Santísima de la Soledad!