jueves, 21 de marzo de 2013

Solemnes cultos en honor a Nuestra Señora de la Soledad y a su Bendito Hijo Yacente

Un año más, nuestra hermandad junto a la del Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo, celebra los cultos cuaresmales en honor a sus titulares: Cristo Yacente y su Madre María en la advocación de Soledad.

Jesús yace a los pies de su Madre, y Ésta llora desconsoladamente sujetando entre sus dos manos la corona de espinas que ceñía la cabeza de su Hijo desde el momento de la Coronación de Espinas hasta que desciende de la Cruz; asimismo, en una de sus manos se encuentran los tres clavos con los que su Hijo Jesús fue crucificado.

El misterio representa el amor, la fraternidad, la entrega que Dios hace de su propio Hijo por todos nosotros, y en definitiva, la unión que entre una Madre y un Hijo existe hasta el mismo momento de la muerte.

El triduo comenzó en la tarde de ayer miércoles, 20 de marzo, y se prolongará hasta la tarde de mañana, Viernes de Dolores.